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Presidente de Costa Rica se solidariza con Guatemala y Honduras por crisis políticas




Durante su paso por la sede de la ONU en Ginebra, el presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, manifestó su solidaridad con Guatemala y Honduras respecto de las crisis desatadas por la corrupción institucional y expresó su confianza en que las instituciones de ambos países, tanto judiciales como partidarias, serán capaces de superar la situación y sabrán lidiar con la responsabilidad de rendir cuentas ante una población que así lo reclama. 

El presidente Solís realiza una gira por varios países de Europa en donde pretende fortalecer tanto la cooperación bilateral con Estados europeos, así como su compromiso con la labor que lleva a cabo desde organismos multilaterales, como las Naciones Unidas y la Organización Internacional del Trabajo; durante su visita a Ginebra, el mandatario abordó temas relacionados con los derechos humanos, el desarme, el combate a la pobreza y el cambio climático. 

En declaraciones exclusivas a Cerigua, Solís expresó que sobre las crisis políticas que se viven en los dos países centroamericanos "lo único que se puede hacer es desear que la transparencia y la rendición de cuentas permitan que los regímenes democráticos, que con tanta dificultad se consolidaron en Centroamérica después de las guerras nacionales, se fortalezcan... no queremos que se debiliten." "Evidentemente cuando este tipo de crisis se producen, generan turbulencia en la población y se puede perder la confianza en la gobernanza democrática", indicó el Presidente al recodar que Costa Rica hace poco tiempo pasó por situaciones similares; "algunos de nuestros ex presidentes fueron señalados por actos de corrupción, pasaron por los procesos judiciales respectivos y todavía muchos de ellos se están desarrollando", añadió Solís. 

"Lo único que se puede pedir o desear es que las crisis se conviertan en una oportunidad para el mejoramiento de la situación nacional y no su debilitamiento y su fragmentación", expresó el dignatario. En conferencia de prensa, el Presidente costarricense se refirió a la posición de su gobierno respecto de la política antidrogas y su impacto en la región centroamericana; "creemos que la militarización de los esfuerzos de control del crimen organizado han sido un fracaso", sin embargo advirtió que la legalización no es la "medicina capaz de resolver un problema que ya se ha convertido en uno de naturaleza estructural en muchas de las regiones de América Latina y otras partes del mundo". 

Para Solís, el debate en torno a la despenalización o incluso la legalización de algunas drogas no está incluyendo por el momento a la que en estos últimos años, según sus palabras, constituye la principal fuente de violencia, la cocaína; "se habla mucho de mariguana... pero no conozco iniciativas que hayan sido colocadas en el debate público para la legalización o despenalización de las drogas llamadas duras", explicó. 

"Para mí, esto constituye una deficiencia de entrada, porque son esas drogas las que habría que controlar y son las que producen más violencia y las que están en el corazón del debate de la lucha contra el crimen organizado", enfatizó el mandatario. Por último, se refirió a la situación de derechos humanos en su país, al señalar que "Costa Rica no tiene opción más que promover y defender esa causa... los derechos humanos son consustanciales al gobierno democrático"; "hemos pasado dos décadas (como Estados) hablando sólo de comercio como la prioridad internacional para generar bienestar en la población, y se nos ha olvidado, desafortunadamente, la responsabilidad de proteger los derechos de las personas, todos los derechos humanos, sin excepción", concluyó.

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